Las blognovelas han irrumpido en la Web como una nueva forma de divulgación literaria, atrapando adeptos que entrega tras entrega viven la trama de las mismas. Este espacio lo he creado para las de mi autoría y Tololo, diario de un Feo es mi segunda incursión en estas. Aventuras y desventuras de un personaje tan ficticio como real, que a través de su diario nos va mostrando verdades cotidianas que conforman la historia de muchas personas en el planeta. Su tono cínico y cambiante que va desde humor hasta reflexiones hacen que su vida sea un cumulo de experiencias que desembocan en situaciones propias de los actos cometidos. Cada día es diferente y novedoso, por lo que difícilmente se aburrirá leyendo esta historia.
La novela es la opera prima de la narrativa, donde se conjugan muchos elementos que deben ser manejados correctamente, aunque siempre me he confesado mas poeta que narrador en mi caminar he escrito varias de ellas, de las cuales dejo acá algunas portadas de las mismas, mi primera incursión en el genero data de 1976 cuando con veinte años aun no cumplidos escribí Liberty, una utopia inspirada en los movimientos juveniles de finales de los 60 a la cual considero solo eso, una primera vez, posteriormente dos años después escribí Acorralado, con una trama en la que se mezcla el suspenso con lo policiaco, desde 1980 hasta el 1986 me sumergí en la novela negra en el subgénero de terror y escribí Pánico y la trilogía de la Maldición, compuesta el primero por la novela con el mismo nombre, el segundo con el titulo de Hilario y el ultimo llamado Beelfegor. Tras un largo descanso en el genero en el 2002 terminé de escribir un par mas, Interludio en el subgénero romántico y Memorias de Paulito en el de sátira, al año siguiente le di vida a Dimensión Cero una obra infantil y tres años después a Fantasmas, un drama y Shitayk mi única incursión hasta ahora en el genero fantástico. Actualmente escribo El Librero, una obra de autor y Proyecto Génesis, la cual significa igualmente mi primera incursión en la novela de ciencia ficción como escritor, ya que como traductor en el 2002 lo hice con la obra El Ojo de Aldebarán del escritor brasilero Volmer Rego, y tras algunos cuentos en el mismo tema, como Sergei sobre la transgenia y El Invento un micro cuento sobre robótica.